Imagen del día

Dios golpea sin cesar las puertas de nuestro corazón. Siempre está deseoso de entrar. Si no penetra, la culpa es nuestra - San Ambrosio de Milán

A menudo no queremos oír las llamadas insistentes que Dios nos hace. O porque estamos rodeados de ruidos egoístas y mundanos. O porque nos entra miedo a abrirle nuestro corazón. Si tuviéramos la valentía de escucharle, descubriríamos que con Él todo nos irá mejor. Que seríamos mucho más felices. Porque con Él dentro de nosotros, todo es diferente. Mucho más hermoso y placentero.

¿Te ha gustado? Comparte este artículo

Días anteriores

Una ley inmoral, nadie tiene que cumplirla – San Óscar Romero

A lo largo de los siglos, muchos hermanos nuestros en la fe han demostrado, Señor, que eran fieles a tu mensaje. Muchos han sido valientes

Leer más
Al único que es necesario siempre tener contento es a Nuestro Señor – Santo Toribio de Mogroviejo

Los halagos de los hombres no deben ser nuestra preocupación nunca. Porque a quien tenemos que complacer es a ti, Señor nuestro. Tú nos pides

Leer más
Por Jesús soy capaz de padecer aún más – San Maximiliano Kolbe

Señor, aunque nos parezcan muchos y grandes los dolores internos y externos que tenemos que soportar a diario, sabemos que, si realmente te amamos como

Leer más
Si no irradiamos la luz de Cristo a nuestro alrededor, aumentará la sensación de oscuridad que prevalece en el mundo – Santa Teresa de Calcuta

No quieres, Señor, que nos quedemos cruzados de brazos viendo cómo muchos hombres y mujeres, hermanos nuestros pues también son hijos tuyos, aunque ellos no

Leer más
Aunque tenga muchos santos por abogados, tengan particularmente a san José, que alcanza mucho de Dios – Santa Teresa de Jesús

Esposo de María y padre adoptivo de Jesús, señor san José, intercede por nosotros al Señor para que Él nos auxilie en los momentos de

Leer más
La oración es el alimento del alma y la presencia de Dios bien llevada es una oración no interrumpida – Santa María Josefa Sancho de Guerra

Dios y Señor nuestro, concédenos la gracia de sentirnos siempre en tu presencia. Para que con nuestras palabras y nuestras obras podamos alabarte permanentemente y

Leer más