Parroquia

La Santísima Trinidad (Málaga)

Imagen del día

Para los cristianos no existen los hombres extraños. Nuestro prójimo es todo aquel que tenemos ante nosotros y que tiene necesidad de nosotros - Santa Edith Stein

Un creyente no puede cerrar los ojos ante las personas que están a su lado, sean ricas o pobres, sabias o ignorantes, sanas o enfermas, santas o pecadoras. Porque todas ellas son el prójimo al que estamos obligados a ayudar. Todas ellas son hermanas nuestras, hijas de nuestro Padre Dios, y sirviéndolas como nos ha ordenado el Señor que hagamos, estaremos cumpliendo con nuestra obligación y por ello seremos premiados.

¿Te ha gustado? Comparte este artículo

Días anteriores

El pan que tú retienes es de los que tienen hambre; de los que están desnudos el vestido que tú guardas; libertad y rescate de los miserables, el dinero que tú escondes en la tierra – San Ambrosio de Milán

Nos cuesta comprender que lo que tenemos son dones, muchos o pocos, que Dios ha puesto en nuestras manos para que los administremos correctamente. No

Leer más
Levántate en este momento y comienza y di: ahora es tiempo de obrar, tiempo de pelear, tiempo conveniente para enmendarme – Beato Tomás de Kempis

Somos dados a posponer las buenas acciones y mejorar nuestra forma de vida para hacerla compatible con los mensajes del Evangelio. Somos perezosos, aunque no

Leer más
Los hombres y aún los niños están dotados de razón, y no deben ser corregidos como bestias, sino como personas razonables – San Juan Bautista de la Salle

Ante todo, lo que debemos practicar con cualquier persona es el respeto y la caridad. Puede que, en ocasiones, no estemos de acuerdo con lo

Leer más

Como creyentes en Cristo, estamos llamados a sembrar el bien en este mundo en el que hemos sido colocados por Dios. Si realmente cumplimos lo

Leer más
Ama la verdad; muéstrate tal cual eres, sin fingir, sin miedos, sin miramientos – San José Moscati

Aunque duela, aunque conlleve sufrimiento y menosprecio, lo correcto es ir con la verdad por delante. Mostrarnos a los demás como realmente somos. No fingir.

Leer más
Vivir la presencia de Dios como lámpara encendida – San José María Rubio

Estar en paz con Dios es vivir con alegría la fe del Evangelio. Esto no es posible ocultarlo. Porque se transmite a los demás automáticamente.

Leer más