Parroquia

La Santísima Trinidad (Málaga)

Imagen del día

Tú sabes excusar y disimular muy bien tus faltas; y no quieres oír las disculpas de los otros – Beato Tomás de Kempis

Siempre encontramos disculpas para perdonarnos a nosotros mismos. Como si lo que hacemos mal, no fuera algo que debemos corregir. Somos misericordiosos, en exceso, con nosotros. No tenemos la misma misericordia con los demás. A ellos no les pasamos una. Más aún, criticamos lo que hacen porque lo hacen y lo que no hacen por lo que no hacen; lo que dicen, porque lo dicen; y lo que callan, porque no hablan. Mejor sería que fuéramos más severos con nosotros mismos y más comprensivos con los otros, admitiendo sus disculpas y reconociendo sus aciertos que, seguramente, son más que los fallos que vemos en ellos.

¿Te ha gustado? Comparte este artículo

Días anteriores

Porque no puedes partir el Pan del domingo si tu corazón está cerrado a los hermanos. No puedes comer de este Pan si no compartes los sufrimientos del que está pasando necesidad – Papa Francisco

Acercarnos a comer el cuerpo de Cristo nos tiene que llevar a compartir mucho más de lo que compartimos. Empezando por abrir nuestro corazón a

Leer más
Servir a Dios es harto más glorioso que poseer todos los principados de la tierra – San Luis Gonzaga

Los creyentes tenemos la gran dicha de poder ser los más bienaventurados de los mortales. Nuestro Dios y Señor nos ha hecho herederos suyos. Es

Leer más
Estar en paz con uno mismo es el medio más seguro de comenzar a estarlo con los demás – Fray Luis de León

Si no actuamos correctamente, si nos abruma el tomar decisiones que estén inspiradas en el Evangelio de Jesús y optamos por hacer lo contrario de

Leer más
A los que tienen paciencia, las pérdidas se les convierten en ganancias, los trabajos en merecimientos y las batallas en coronas – Fray Luis de Granada

Debemos practicar más la virtud de la paciencia. Porque las prisas, el nerviosismo, el ansia por llegar antes que otros y superar a los demás

Leer más
Amar significa viajar, correr con el corazón hacia el objeto amado. Amar a Dios es, por tanto, viajar con el corazón hacia Dios  – Papa Juan Pablo I

Si amamos a Dios como nos ama Él, debemos estar siempre dispuestos a ir a su encuentro, con alegría y con esperanza. Y a verle

Leer más
Y aún más: ¿qué es amar? Amar es perdonar, vivir reconciliados.  Y reconciliarse es siempre una primavera del alma – Hermano Roger, fundador de Taizé

Fuera el odio y el rencor de nuestras vidas. Fuera de nosotros el pensar mal de los otros, el envidiar a los demás, el humillar

Leer más